La inmortalidad de las fotografías está sujeta a la mortalidad del recuerdo.
Recuerdos
El olvido voluntario solo consigue atenuar los recuerdos.
Los recuerdos son los regalos que nos dejan las despedidas.
No echamos de menos a las personas, sino lo que sentimos con ellas.
Por mucho que lo intentes, hay recuerdos que no te olvidan.
Lo peor de la memoria selectiva es que no nos consulta su criterio.
Nuestra única pertenencia son los recuerdos, y a veces los extraviamos por el camino.